A veces creo que es contraproducente luchar ininterrumpidamente contra mi thanatos, aunque sigo haciéndolo. Soy mujer, y es de las pocas cosas de las que estoy orgullosa, aunque la historia nos haya sido infiel, aunque seamos esa especie de seres que fue creada por y para el resto y no para sí misma. Cómo si todo naciese desde una costilla de Adán. Mentira.
Mis convicciones y a su vez, mis contradicciones me han demostrado que soy algo extraña.
He luchado en continuo contra aquellos que no se atrevían a pensar, alegando que eran jóvenes, como si la juventud sólo fuese sexo, drogas y alcohol, y el derecho a pensar estuviese censurado.
Autodidacta, consecuencia de un sistema fallido, desesperante, jerarquizado y frío.
Es difícil cautivarme y más complicado sorprenderme, aunque París siempre será mi punto débil.
La mayoría de tíos piensan que soy una desapacible con carácter áspero, una borde en mayúsculas en definitiva. Sólo de puertas para adentro puedo ser yo. Ahí afuera soy como una escultura hermética en composición cerrada y con gesto hierático. No más. Y luego soy la más sensible de las bestias en las que me puedo convertir fuera. Una de esas tontas enamoradizas que siempre caen. Podría despertarte cantando como una loca versos íntimos después de haber pasado una noche contigo, con la sonrisa más pura del universo.
Hago viajes astrales a menudo y en cualquier charla sobre utopías ( política en general) y escritura ( véase arte)si es en buena compañía, puedo alcanzar el zenit.
Soy un bicho raro y me atraen las rarezas, la gente extraña, difícil de conseguir, la gente que esconde algo, alguno me sorprendió siendo finalmente como los demás, te dirá que guapa estás mientras te mira las tetastodos cometemos errores. Y qué bueno haberlo vivido.
2 comentarios:
"escultura hermética en composición cerrada y con gesto hierático" -está genial esa frase.
acojonante,adorable,admirable asombrosa, besos, boca,...y todo un abc q me viene a la cabeza al leerte
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